La dislexia es un trastorno del aprendizaje, por lo cual es mucho más fácil reconocerlo a temprana edad, o sea durante la infancia. Cuando los niños apenas aprenden a leer y siempre hay un promedio de la edad a la que comienzan ya a leer por si solos y muchas veces los niños que sufren de dislexia suelen tardarse más en aprender a leer rápido y fácil por si solos.
La dislexia suele ser reconocida en los niños que tienen la edad de entre 7 a 8 años de edad. El diagnóstico se lo da a través del análisis de la lectoescritura, porque es importante saber que tan bueno es el desempeño y en que está desarrollando el mismo. Pero en algunos casos, la dislexia puede no ser detectada hasta la adolescencia o la edad adulta, especialmente si no se han presentado desafíos de la lectoescritura significativos anteriormente.
Si presentas dificultades para leer, escribir, deletrear o comprender lo que lees, es importante hablar con un profesional de la salud para evaluar si puedes tener dislexia u otro trastorno del aprendizaje. Si ya eres un adulto y tienes dificultades con la lectura y la escritura, nunca es tarde para buscar ayuda y tratamiento para la dislexia para poder mejorar tus habilidades y calidad de vida.
Si presentas alguna de estas señales, muy probablemente tengas dislexia.
Dificultades en la lectura
La persona puede leer lentamente, confundir letras o palabras, o tener dificultades para comprender lo que lee.
Dificultades en la escritura
La persona puede tener problemas para escribir palabras correctamente, invertir letras o palabras, o tener dificultades para expresar sus ideas por escrito.
Problemas con la ortografía
La persona puede tener dificultades para recordar cómo se escriben las palabras, y cometer errores ortográficos frecuentes.
Dificultades para memorizar
Se pueden presentar dificultades para recordar cosas como números de teléfono, nombres o fechas importantes.
Problemas para seguir instrucciones
Son dificultades para comprender y seguir instrucciones escritas o habladas.
Dificultades para pronunciar las palabras
Puede ser posible que existan problemas para pronunciar palabras correctamente o puede tener una pronunciación poco clara o muy deficiente.
Es importante tener en cuenta que cada persona con dislexia puede presentar síntomas distintos y existen varios grados de intensidad y de dificultad para realizar ciertas actividades. Si presentas estos síntomas o sabes de alguien que los presente y tienes sospechas de que tú o alguien puede tener dislexia, es importante poder buscar ayuda de un especialista en educación o salud para poder obtener un diagnóstico y tratamiento para la dislexia adecuado.
Si bien es cierto, la dislexia no tiene cura y simplemente se intenta buscar un tratamiento para la dislexia que resulte adecuado para la persona y se ajuste más a sus necesidades.
Aunque creamos que la dislexia en la mayoría de casos es descubierta en la etapa de la infancia de una persona. Pero existen varias personas que detectan ser disléxicos o sufrir de este síndrome en la adultez, y antes no se percataron de que lo sufrían.
Esto se debe principalmente a que las personas que lo suele notar la dislexia en adultos es que no tienen este síndrome en un grado alto, y posiblemente hayan presentado ciertas dificultades para la lectoescritura o algo similar, pero no en gran manera. Por esta razón es que suele ser más complicado cuando son niños. La dislexia en adultos se presenta en un error repetitivo una y otra vez durante la lectura, la escritura o al escuchar algo.
La dislexia en adultos puede tener un gran impacto en la vida cotidiana como en el trabajo o en la educación. La dislexia en adultos pueden presentar dificultades también cómo leer informes, correos electrónicos, formularios y otros documentos o tareas importantes durante su jornada laboral. Y en su vida cotidiana pueden presentar dificultades para leer un libro, escribir, ya sea en papel o hasta por aplicaciones como redes sociales.
Favorablemente, hay varias estrategias y recursos disponibles para ayudar a los adultos con dislexia a manejar sus dificultades de lectura y escritura. Al igual que los tratamientos de dislexia para niños, también hay para adultos, con cursos o clases personalizadas ajustadas a sus necesidades. También como complementos de esto puede servir las tecnologías de asistencia, tales como herramientas de ortografía y gramática automatizada, programas de lectura en voz alta y aplicaciones de organización.
Es importante recordar que la dislexia no tiene nada que ver con la inteligencia de una persona y es importante también no confundir el déficit de atención con este síndrome.
Cualquier persona y sobre todo los adultos con dislexia pueden tener éxito en todos los ámbitos de la vida con la ayuda adecuada y necesaria. Si presentaste alguno de los puntos mencionados anteriormente, te recomendamos que busques ayuda con un profesional de salud mental o especialistas en este tipo de trastornos del aprendizaje y síndromes para obtener un diagnóstico preciso y recibir tratamiento para la dislexia y apoyo. De esta forma podrán brindarte el tratamiento para la dislexia ajustado a tus necesidades y con el cual con base en tus necesidades mejorara con el paso del tiempo.
¿En dónde puedo encontrar terapia profesional y especializada para tratar la dislexia?
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